Concluye FNAAD con desfile cìvico-militar marchas por el engrandecimiento de México
Luego de haber realizado tres marchas a nivel nacional con el lema "Por el engrandecimiento de México", este dìa concluyeron esta actividad con un desfile cívico militar encabezado por el Ejército Méxicano por las calles de la ciudad de Chihuahua.
Bajo un ambiente emotivo, el sonar de los clarines, cornetas y tambores, con el paso firme cientos de jóvenes provenientes de 15 estados de la Republica Mexicana, hermanados en la Federación Nacional de Asociaciones en Alta Disciplina, realizaron este día la llamada marcha Por el Engrandecimiento de México.
El retumbar de los tambores y cornetas de la banda de guerra del XXIII Batallón de Infantería junto con más de 500 jóvenes de agrupaciones deportivas y militares, causó asombro a conductores y peatones que detuvieron su paso para ver marchar al contingente que desfiló con sus uniformes de gala desde el Parque Revolución hasta la Plaza de la Grandeza. Los vecinos del Parque Revolución, lugar donde se ubica el mausoleo del general Francisco Villa, no sabían qué pasaba; decenas de elementos de la Policía Municipal del grupo K-9 comenzaron a llegar poco antes de las 10:00 de la mañana y al mismo tiempo los efectivos del Ejército bajaron de sus camiones, cargando sus pesados rifles como si fueran a la guerra o a atacar al enemigo. Unos asomándose por las ventanas y otros más que a esa hora corrían en el parque ejercitándose estaban desconcertados, sobre todo porque faltan dos meses para el desfile del Día de la Independencia y cuatro para el Aniversario de la Revolución. El pensar general de todos era que había pasado algo, sobre todo porque hasta la Cruz Roja y Bomberos hicieron acto de presencia, sin embargo, la llegada de los elementos de Vialidad motivó a pensar que se trataba de un desfile y no de algún hecho violento. Para sorpresa de muchos, en cuestión de 15 minutos el parque estaba lleno de jovencitos y otros que, como dicen las abuelitas "ya no se cocen al primer hervor", todos ellos portando sus trajes de gala y algunos con uniformes muy similares a los militares con la única diferencia que en lugar de armas, ellos utilizan el deporte para combatir a la delincuencia, fomentando entre los jóvenes la disciplina y sana competencia para ser mejores. Por los acentos de cada contingente se sabía que cada agrupación procedía de distintos puntos del país. Unos llegaron desde Mérida, Estado de México; Tijuana, Ensenada, Tecate, Rosarito de Baja California, Saltillo, Coahuila; Zapopan, Guadalajara, Guanajuato, Juárez y Chihuahua. El sol norteño causó sus estragos en los contingentes procedentes del sur de la república, porque aunque sea el mismo astro que aparece y se oculta en todo México, la intensidad aquí en Chihuahua quema la piel y provoca desmayos a quienes no están acostumbrados. Llegada la hora acordada para la partida, una sola orden clara y concisa por parte del militar que comandaba a la banda de guerra y escolta del XXIII Batallón de Infantería destacametado en esta capital bastó para que todos comenzaron a tomar sus posiciones porque, como la autoridad superior, encabezarían el desfile. Se alineó al frente la banda de guerra seguida por la escolta y luego un grupo de efectivos de Ejército Mexicano; una parte hombres y otra de damas portando su uniforme y botas. Atrás de ellos continuó el grupo K-9 de la Policía Municipal, cada agente con su respectivo canino a un costado de ellos y atrás todas las agrupaciones de la Federación Nacional de Asociaciones de Alta Disciplina que participan en la Convención Deportiva por la Prevención del Delito. Del parque Revolución tomaron la calle Jiménez hacia la avenida Venustiano Carranza y en cada una de las ventanas, baquetas y puertas ya los esperaban los vecinos que comenzaron a escuchar los tambores y cornetas y no dudaron en salir para observar qué estaba ocurriendo. Al igual como en las películas de guerra, cada contingente portaba sus estandartes cada uno con sus respectivos escudos de las asociaciones que representan. Uniformes blanco con negro o rojo, otros completamente negro, color beige, camuflaje o completamente verde, todos ellos marcharon a toda prisa por las calles del centro. Cuando dobló el contingente por la calle Jiménez, los elementos de Vialidad detuvieron el tráfico vehicular dejando sorprendidos a los conductores y peatones por el numeroso grupo. Con disciplina todos avanzaron hasta llegar a la Plaza de la Grandeza, donde se haría el acto inaugural de la convención.